Viaqua, líder en la gestión integral del ciclo del agua, está plenamente comprometida con el cuidado de la calidad del aire y con la reducción de su huella de carbono, un indicador que mide las emisiones directas e indirectas de gases de efecto invernadero provocadas por un producto o servicio a lo largo de su ciclo de vida. En concreto, en 2018 el 100% de la energía consumida por Viaqua era procedente de fuentes de energía verde, reduciendo así sus emisiones en 21.783 Tn de CO₂ (equivalentes al CO₂ que captura un bosque de unos 416 pinos).

Desde Suez España se ha marcado una ‘hoja de ruta’ en la lucha contra el cambio climático y la contaminación atmosférica, es el llamado Plan Estratégico de Desarrollo Sostenible (2017-2021), estrechamente ligado a los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) aprobados por Naciones Unidas en 2015 junto con la Agenda 2030. Para 2021, Viaqua reducirá en un 90% sus emisiones de CO₂ derivadas del consumo eléctrico, siguiendo la ruta del Plan Estratégico de Desarrollo Sostenible.

Para favorecer la movilidad verde, el 21% de los turismos de Viaqua son híbridos o eléctricos y el 5% de las furgonetas son eléctricas, lo que supone que el 26% de su flota es sostenible (y este porcentaje aumenta cada año).

Viaqua es también pionera en la transformación de las tradicionales depuradoras de aguas residuales en biofactorías, que permiten reducir las emisiones de CO₂ y minimizar la huella de carbono. Como es el caso de la EDAR de Ourense, considerada la “Biofactoría Norte” gracias a la Unidad Mixta CIGAT-BIOFACTORÍA desarrollada por Cetaqua y Viaqua con el apoyo de la Xunta de Galicia.

La calidad del aire es un valor importante dentro de la cultura empresarial de Viaqua, que aboga por un nuevo modelo de relación con el planeta. La lucha contra el cambio climático y la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible es un reto que nos afecta a todos.